Estimados Reyes MaJos,


¿Cómo empezar esta carta? No sé, seamos sinceros: hace años que no os escribo, que no voy a la cabalgata y que no os dejo chupitos de licor a vosotros ni agua para vuestros camellos. Tampoco pondría la mano en el fuego asegurando que me he portado bien este año. Ha habido un poco de todo. Nadie es perfecto. Eso sí, las intenciones con las que he hecho las cosas nunca han sido malas. Entiendo que con eso vale, ¿verdad?
Pues entonces, a sabiendas que estoy cerca de la beatificación, os detallo a continuación unas fruslerías que se me han antojado y que vosotros, poderosos y ultra-mega-híper-súper-chachi-millonarios como sois, seguro no tendréis problema en regalarme:

  • Una replicante idéntica a mí sin fecha de caducidad: para tener una mejor amiga siempre a mi lado.
  • Un tele transportador (así no me haría falta la puerta del armario hacia Narnia). O, si es muy caro, me conformaría con los Zapatos Rojos del mismo modelo que Dorothy. En un 39, por favor.
  • Una cápsula del Dr. Slump con una máquina del tiempo dentro: es que soy un pelín inquieta, sabéis. Prometo no cambiar naaaaada, por las bragas de Mafalda.
  • Un mapa del merodeador: para tener localizados a todos mis amigos siempre que quiera. Como si viera a los SIMs. 
  • Una espada láser: para liberar momentos de tensión. Igual que una pelotita de goma antiestrés versión gore.
  • Un contenedor de fantasmas: por si me cruzo con algún que otro gilipollas, poderlo succionar y que desaparezca de mi vista.
  • A Wall-E y a R2D2 (al plasta de C3PO os lo podéis ahorrar): para que me hagan compañía cuando me aburra. Vale, vale, cierto, cierto, y para me ayuden con las tareas domésticas. A Chewaka ni nombrarlo, que me dejaría pelo por todas partes. Los Ewoks tampoco, aunque vayan más tapados.
  • Un mini-portátil híbrido entre Hal y Skynet con la pantalla táctil de Minority Report. Con botón de apagado rápido de emergencia por si se vuelve majara, que no soy tonta. Disco de rearranque incluido, claro.
  • Un caza imperial: para darme el gustazo de hacer unos loops por el cinturón de Orión.
  • Una casita de verano en Pandora: para mis momentos disconnecting people, connecting nature (imprescindible el plugin USB para el pelo).
  • El chip prodigioso: para visitar lo que hay dentro de los demás. Esto es pura curiosidad, lo admito. No tuve suficiente con ‘Érase una vez el cuerpo humano’, mira.
  • La motosierra de Leatherface: para mis trabajos de Bricomanía.
  • La careta de Jason: creo que quedaría monísima en mi tocador.
  • El triciclo de Jigsaw: sería un precioso florero.
  • Y ya puestos, una de las motos de Tron también estaría muy guay. Con el equipo fosforito a conjunto. Color rosa, NO.
  • El teléfono/mando universal de James Bond: para poderlo llevar todo, todo, todo por control remoto y no tener que mover el pandero del sofá si no me apetece.
  • La brújula de Jack Sparrow: para que siempre me indique dónde está lo que más deseo en cada momento. Para cuando cambie de ideas. Hay que ser previsora.
  • A Saphira, la ‘dragona’ de Eragon: para que me lleve a dar un voltio por Barcelona mientras quemamos algunas ‘basílicas’ desde el aire.
  • Un Terminator (último modelo a poder ser, T-1000 o T-X, ¿vale? No me regateéis con un roñoso T-800 en un mercadillo): para que me proteja de posibles - o seguros - enemigos que haré utilizando todo lo anterior.
  • El brazo de Hellboy: por si me entra un ataque de cólera y necesito entrar un momentín al infierno a patear los culos de unos cuantos demonios.
  • El bastón de Gandalf el Blanco y su versión de bolsillo como la varita de Harry Potter (por favor, no la confundáis con la de Ron que la liamos): pues para,… hace falta que lo explique ??? Pues por si se me enfadan los del inframundo tras ser humillados, por ejemplo. 
  • El neuroconector de Días Extraños: ¿o es que vosotros nunca habéis querido leer otras mentes?
Mmmmm, y creo que ya está; bueno, no, me queda un último caprichito: ¡quiero un condensador de Fluzooo! Que no tengo ni idea de para qué sirve, pero mola mazo. Porfi, porfi, porfiiiii.

Ah, y un aviso: si os estáis planteando regatearme en algo, tened en cuenta que desclasificaré vuestro pasado,…
-          necrófilo (viejo y canoso Melchor buscando tema en el cementerio de Montjuic, tararí que te vi),
-          zoofílico (pelirrojo Gaspar teniendo una sesión convenientemente gravada con cámara oculta en la selva con el Rey León mientras le cantabas Hakuna Matata en la nuca)
-          y pedófilo (eh, Baltas,…digo, ¿Michael?)

... en Wikileaks, que suena a chungo.


Venga, un cariñoso abrazo a los cuatro (porque el gordinflón de rojo no se salva, ¿o qué os pensábais? Nunca dejo rehenes.),

Yo

PD: por cierto, cuando vengáis a dejarlo todo, por favor, traed monedas sueltas para el parquímetro de la zona azul o verde, ¿ok? Es que a los no residentes (es lo que tiene venir de Oriente) se les clava por quedarse en la city. Sorry.

Comentarios

  1. Compartirem regals????


    Kiri

    ResponderEliminar
  2. Pqña saltamontes, te has ovidado de pedir un bicing de los que nunca se estropean, para tu pqña amiga!
    Cris

    ResponderEliminar
  3. @Kiri: nooo, son mi tesorooooo,... ñeñeñeee :[
    @Cris: mejor te pido el patinete de regreso al futuro !!! ;)

    ResponderEliminar
  4. Ja deia jo que tenies un cert aire a Gollum...

    Kiri

    ResponderEliminar
  5. Una replicante idéntica a mi para tener una amiga siempre a mi lado....

    Estás segura que et cauries bé sempre? Fins i tot quan, com tots, tens moments insoportables?

    Petons!

    Guillem

    ResponderEliminar
  6. Home Guillem, els replicant son robots, així que entenc que vénen amb el botó ON/OFF de sèrie ;) Ideal.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Mi blog, mis normas.
No verás tu comentario publicado hasta que yo lo haya revisado.
Rodolí! ;)