Llamada providencial

Escribo el post anterior, agobiadísima de la vida en el fondo, pero intentando hacer un día a día de lo más rutinario para autoconvencerme de que todo está bien, cuando me llama el jefe a su despacho. Voy. Comenzamos a discutir por un marrón. Lo normal.

Mientras estamos enzarzados en nuestra pelea de matrimonio con bodas de oro cumplidas, suena mi móvil personal. Mierda, me los he dejado en mi mesa (llevo 2: curro y personal). Salgo del despacho a toda prisa pensando que algo malo ha ocurrido en mi familia (otra de mis paranoias, en fin). Miro el número. No me suena de nada, descuelgo y...

- Buenas tardes, la Señorita Sometimes, Charlotte Sometimes, ¿por favor?
- Sí, soy yo misma - contesto seca, ya pensando en cómo mandar a paseo a otro call center ofreciéndome un cambio de operador habiendo sacado mis datos 'aSaberDeDóndeYDeQuéIlegalManera'...
- Mire, pues soy Fulanita De Tal y la llamo del gimnasio DIR (sí, flipad, voy al gym, bueno...cuando me acuerdo, claro)
- Ah...
- Este mes pasado fue su cumpleaños y le queremos realizar un obsequio que... - me dice
- ¿Y en qué consiste 'ese obsequio'? - interrumpo con todo mi 'rintintín' sospechando que de regalo nada de nada, sino que va a ser un saca-dinero, porque nadie regala duros a cuatro pesetas
- Pues puede usted elegir entre un masaje relajante o un masaje reductor - me aclara
- (Flipando) vaya... (sigo flipando) anda... ¿y solo puedo elegir uno? - tengo que intentarlo
- Sí, claro - se ríe
- (Flipando aún) ¿y puedo elegir masajista? - me gusta apretar, qué pasa
- Bueno, podemos consultar la agenda del personal que usted prefiera, por supuesto - me dice un tanto sorprendida
- (Oh seeeh, vaya triunfada Charlotte) ¿Pues puedes mirarme disponibilidad con Bruno (sí, sí, me sé algunos nombres de los del gym) para un masaje relajante, si eres tan amable? - es que mira que soy maja cuando quiero...

Y no. No he preguntado lo del 'final feliz', malpensad@s... Bueno, al menos en voz alta. Creo.

Suerte que fantasear es gratis y nadie se entera si tu no quieres. Uhmmm... Quizás tenga que abrir una sección de relatos erótico-festivos en Tecleando.

Ya os contaré. O no ;)

Comentarios

  1. Pues a ver si el tal Bruno te relaja un poco porque me da que lo necesitas como el comer. (El fin de semana rural no lo ha conseguido por lo que parece.)

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  2. Y yo tantos años apuntada en el gym y ni un detallico??? Jo. Pues nada nena, que los disfrutes, al masaje y a Bruno...jajajaj

    1besico!

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  3. disfrutalo guapa!!! yo una vez a un masaje y por poco no me da un síncope!!! el colega era feo, estartalado, gilipollas... todo lo que te diga es poco, total que salí peor de lo que entré!

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